El hombre está muy relacionado a la naturaleza. Nuestra relación con ella es vital, sin embargo en nuestros tiempos lo hemos olvidado, principalmente en las grandes ciudades.

En la antigüedad, el hombre debió aprender a observarla y seguir sus leyes para poder construir sus viviendas y cultivar sus alimentos. Si no lo hacía corría el riesgo de que un alud caiga sobre su casa, de perder toda una cosecha y padecer hambre,  o que la crecida de algún río se lleve todo un pueblo.

Lo mismo nos pasa hoy, pero no lo queremos ver. Hemos olvidado estas leyes queriendo imponer otras, regidas por intereses que nada tienen que ver con la verdadera realidad humana, animal y terrestre.

La dirección de los vientos, los ciclos de la luna y el sol pueden influir en los emprendimientos. Desde hace mucho se sabe que los ríos pueden tener diferentes características en sus orillas opuestas. Una de ellas puede sedimentar ricos nutrientes fertilizando el suelo, y la otra ser lavada por la misma corriente y sufrir desmoronamientos.

Feng Shui es también Ecología

Los antiguos chinos, bien conocidos por su paciencia e inteligencia todo lo observaron.

De esas observaciones surgieron registros, que a través de los años se fueron plasmando en un conjunto de saberes. Estos fueron mezclándose con los mitos al transmitirse de generación en generación durante milenios, ya que el origen del Feng Shui es milenario.

De aquí surge la idea de que una Tortua negra custodia nuestras espaldas, de que un tigre blanco aleja los enemigos, un dragón verde atrae la fortuna, un ave fénix augura un buen porvenir y una serpiente amarilla cuida que siempre haya calor de hogar.

Estos animales celestiales surgieron de la observación de la naturaleza, que es la base del Feng Shui, muchas veces olvidada. Así que no son animales fantásticos que se leen solo en los cuentos, son seres bien concretos que pueden tomar forma hoy en día. Son las mismas leyes de la naturaleza.

En las ciudades los animales celestiales son los edificios y casas vecinas, que representan a las montañas. Las calles y avenidas son los ríos, las flores y macetas que colocamos en nuestra puerta de entrada son nuestra ave fénix….

Feng Shui es también Ecología

Se dice que el entorno influye en un 70% al hacer una armonización de Feng Shui.

El Feng Shui también es ecología. Porque debemos volver a observar a la naturaleza y lo que nos rodea, aprender a analizar cómo influye en nosotros y seguir sus leyes, todavía hoy. Aunque parezca mentira, tanto hoy como en la antigüedad las casas se derrumban si lo hacemos sobre suelo movedizo.

Comprenderemos que observar la naturaleza, seguir sus leyes, y respetarla es cuidarla.

Si contaminamos nuestro entorno con nuestros desperdicios, si tratamos de cambiar el curso de un rio, no estamos haciendo Feng Shui. Y eso se va a notar en nosotros, porque todos somos una unidad.

No podemos aislar nuestro hogar del mundo porque necesariamente estamos incluidos en él. Para mí hacer Feng Shui es integrar nuestra vida diaria a la naturaleza, cuidarla y respetarla.

Hacer Feng Shui no es ningún cuento chino.

Feng Shui es también Ecología

¡ Gracias por compartir !


Un Saludo
Carmen, Asesora profesional de Feng Shui.

¿Te gustaría realizar una consulta de Feng Shui para tu hogar?
¡Comunícate conmigo!