Regalo de las estrellas

En el momento en que nacemos, el cielo nos regala las distintas energías de las que nos vamos a valer en nuestra vida, y también a las que vamos a estar sujetas, bajo esta “Promesa Natal”. Podemos leer muchas cosas en una carta natal.

La Astrología es un arte que aprendió a leer esta información de los planetas y a interpretarla dentro de lo que se conoce como Carta Natal.

La Astrología al igual que el Feng Shui se basan en la Ley de Correspondencia:

“Así como es arriba es abajo, así como es afuera es adentro”.

Podemos realizar una lectura del cielo y conocer nuestra esencia, de la misma manera en la que podemos, observando nuestro hogar, conocer nuestro interior.

En la carta natal están representados los doce signos, ya que todos tenemos en nuestro interior la energía potencial para expresarlos en su totalidad. Todos tenemos al Yin y al Yang en nuestro interior.

Los planetas están en un determinado lugar en el cielo, y se ubican siempre en relación a alguna constelación, que no son otra cosa más que los signos del zodíaco. Aparecen dibujados en esta Carta Natal en un determinado signo bajo el cual van a poder expresarse. Es por esto que todos tenemos características distintas, no todos tenemos los planetas ubicados en el mismo lugar, y a veces nos sale más fácil la energía de un determinado signo, y hay otro que nos cuesta un poquito más.

Cada planeta a su vez tiene una determinada “habilidad” o “tarea”, por así decirlo.

Por ejemplo, el planeta más conocido es el sol, el signo solar es aquel que todos conocemos y solemos leer en las revistas, en la sección del horóscopo. Tiene la habilidad de brillar, representa nuestra voluntad y propósito de vida, y debe recorrer el “camino del héroe”, que no es otra cosa más que tratar de expresar nuestro verdadero yo a pesar de todas las circunstancias.

La carta natal a su vez está dividida en lo que se llaman las “Casas Astrológicas”. Representan las distintas áreas de vida de una persona.

Lo mismo hacemos en Feng Shui al dibujar un plano Ba-Guá, o al analizar las Aspiraciones Vitales en el Living de una casa.

Cada punto cardinal en el Feng Shui, tiene una determinada Energía a trabajar, un área de vida, al igual que las casas astrológicas.

Por ejemplo, para el Feng Shui, el Norte en el Hemisferio Sur, representa la Fama y Reputación, como nos mostramos frente al mundo. En una Carta Natal, la casa diez, por ejemplo, también representa nuestra presentación en el mundo, nuestro lugar en la sociedad. Es una casa de realización, de culminación, de éxito: todos ven lo que hay ahí.

En la carta Natal también está representado nuestro hogar. La casa IV, entre otros significados, posee la información de cómo va a ser nuestra casa, si va a ser tradicional, grande, ruidosa, excéntrica. Pero también simboliza nuestras emociones y sentimientos. Podemos hacer una lectura como una unidad de nuestras emociones naturales y nuestro hogar, en el contexto de nuestra Carta Natal. También podemos leer aquí cómo es nuestra familia de origen, nuestro Clan Familiar.

Nuestra historia personal también es la historia de nuestra familia.

La Astrología los unió, lo mismo que el Feng Shui, el cual cree que la casa somos nosotros mismos.

Y yo también estoy convencida de eso.

Son grandes herramientas de autoconocimiento. Podemos descubrir a través de ellas nuestras mejores habilidades, y también tomar conciencia de cuáles son nuestras debilidades. También nos ayudan a encontrar las herramientas diseñadas a nuestra medida para poder superarnos.

Pero sobre todo, a mí me parece súper esperanzador el saber que de alguna manera estábamos destinados a vivir este aquí y ahora, en este tiempo y lugar, en nuestra casa y con la familia que tenemos.

Somos un regalo de las estrellas.

Un Saludo
Carmen, Asesora profesional de Feng Shui.

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