En estos días se realizan los tan populares festejos de Halloween. Aparentemente no tiene nada que ver con Feng Shui… les quiero contar que no es tan así…
El verdadero origen de Halloween es Druida, y llegó a nosotros a través del pueblo Celta, ellos lo llamaban SAMHAIN, y era tan importante el festejo que, para ellos en este día, o mejor dicho, en esta noche, comenzaba el año.
Los pueblos en la antigüedad, tanto los Celtas como los chinos, basaban su subsistencia y riqueza fundamentalmente por las actividades agrícolas, por lo que los cambios de las estaciones eran sumamente importantes.
Samhain se celebraba la noche del 31 de octubre, dando fin al verano, y eso es lo que significa la palabra celta “Samhain”, “Fin del verano”.
Esta festividad marcaba el momento en el cual se realizaba la última cosecha, dando inicio al invierno y anunciando la venida de días oscuros, fríos, y en donde el clima no permitía salir al exterior a trabajar o hacer las distintas actividades.
Por lo tanto, esta noche indicaba que era momento para la meditación, para el encuentro espiritual, la organización del futuro y la vida dentro del hogar. Tiempo de quietud, de subsistir de lo recolectado, y de aprovechar el momento para el descanso y la renovación.
Los celtas creían que durante la noche de Samhain se creaba un puente entre el mundo de los humanos y de los espíritus, encontrándose y uniéndose ambos, permitiendo pasar de un lado al otro tanto benévolos como malévolos.
Los ancestros familiares eran invitados y homenajeados mientras que los espíritus dañinos eran alejados. Se cree que el uso de trajes y máscaras se debe a la necesidad de ahuyentar a los malos. Su propósito era adoptar la apariencia de un espíritu maligno para evitar ser dañado.
Se suele dejar fuera de las casas comida para mantener a los malos espíritus contentos. También es costumbre encender una vela por cada antepasado, para rendirles tributo, y para que sirva como guía para que puedan encontrar el camino a nuestro hogar, y propiciar ese feliz reencuentro.
Se consideraba que, durante esta noche, de la confusión surgía el orden que permitía el renacimiento de los buenos y positivos valores de los seres humanos, así como de todo lo que poblara la tierra.
Hasta hace no mucho, la mayoría de la gente vivía en el campo, en contacto directo con la Naturaleza todos los días. Todo el mundo sabía por dónde salía el sol, en qué fase estaba la luna o si estaba por llover.
Hoy pasamos mucho tiempo entre paredes, dentro de nuestra casa, dentro de oficinas, o viajando en el subterráneo. Usamos aire acondicionado y calefacción que nos aíslan del clima. En las ciudades, hemos olvidado por dónde sale el sol ya que no podemos verlo porque nos lo impiden los edificios.
Hemos perdido nuestro antiguo vínculo con la naturaleza.
Justamente el Feng Shui se ocupa de esa conexión entre las personas y su entorno, la naturaleza y cómo interactuamos con ella.
Me gustaría que aprovechemos este festejo de Halloween, y recordemos el significado profundo de su origen, recordando la esencia del Samhain y conjugarla con la esencia del Feng Shui, ya que ambas no hacen más que observar la naturaleza.
En el Hemisferio Norte, que es dónde tuvo origen esta festividad, el otoño ya se hizo presente.
Los días se acortan cada día más, y el aire poco a poco se vuelve frío, invitándonos a quedarnos dentro de casa, a mirar hacia adentro y darnos la oportunidad de realizar actividades más tranquilas, que es lo que proponía esta fiesta de Samhain, volvernos hacia adentro, anidar.
La energía otoñal llegó desde el Oeste en los comienzos del otoño (Agosto-Septiembre) y actualmente nos llega desde el Noroeste en el otoño avanzado, que es el que está comenzando en este momento, siempre hablando del Hemisferio Norte.
El otoño ya se instauró y se corresponde energéticamente con el momento del día en el cual ya todos terminamos de cenar y nos estamos preparando para anidar, para ir a dormir. La energía Yin predomina, volviéndonos hacia adentro, y nos aquieta.
Todavía estamos despiertos, pero en quietud. Es el momento del día en el cual dejamos las cosas listas para el día siguiente, sabiendo que nos iremos a descansar, pero con la tranquilidad de que hemos cumplido con nuestras responsabilidades.
Esta Energía nos hace responsables, confiables, líderes y dispuestos a defender nuestros ideales con fuerza. Una fuerza que viene desde adentro, fuerza propia, por eso es importante que nos volvamos hacia adentro, para conocernos.
Para acompañar esta propuesta que nos ofrece la naturaleza, unirnos ella y aprovechar esta energía, debemos potenciarla correctamente.
El sector a trabajar en nuestras casas en este momento del año en el Hemisferio Norte es el Noroeste, área de los metales. Debemos prestar atención a qué objetos tenemos aquí.
Los colores del otoño son los rojizos, los anaranjados, los marrones y los amarillos, es decir, los colores de la tierra, que es la que nos regala este elemento metal al cual corresponde esta estación del año. Por lo tanto, si utilizamos estos colores sobre todo en el Noroeste de nuestra sala de estar, vamos a estar acompañando y potenciando esta energía disponible.
Es un buen momento del año para meditar, sobre todo si lo hacemos antes irnos a dormir para aprovechar la energía de los metales que está muy activa a esta hora del día, antes de acostarnos.
Podemos buscar un lindo lugar cálido en nuestra casa donde podamos estar en tranquilidad. Un buen almohadón o una alfombra en el piso nos ayudará a conectarnos con la tierra, y dejar que nos ilumine solamente una lámpara de sal. Si es de su agrado, les sugiero que acompañen este momento con el sonido cuencos tibetanos, que movilizan la energía del metal.
En el Hemisferio Sur también festejamos Halloween, pero aquí el clima es otro. La primavera es la que acapara toda nuestra atención ahora.
Es la estación del inicio, de quitarse finalmente el frío y la quietud del invierno. En este momento las plantas y las flores son las protagonistas.
Las plantas pertenecen al elemento madera, que es el que se despierta durante la primavera y nos hace querer iniciar proyectos. A volvernos activos y vivir con intensidad.
Es un momento del año Yang sumamente brillante, que nos da ganas de vivir la vida. Y eso lo experimentamos teniendo más ganas de pasar tiempo en exteriores, en contacto con la naturaleza y, sobre todo, en contacto con nuestros seres queridos, con nuestra familia.
La madera es perfecta para activar todo lo que necesite crecimiento, desarrollo y progreso.
El momento del día que corresponde a este momento es la media mañana, antes del almuerzo. La orientación que debemos trabajar en el Hemisferio Sur en este momento es el Noreste.
Como las plantas son las protagonistas, es buen momento para eliminar de tu casa las plantas que no estén saludables, y recordar regarlas con mayor frecuencia, ya que el tiempo es más caluroso y los días más largos.
Es ideal colocar en el Noreste del Living una linda planta de hojas redondeadas, que te va a ayudar a conseguir los recursos que necesitas para hacer realidad esos proyectos que tenés en mente.
También es tiempo de limpiar y de deshacerse de todo lo viejo para no arrastrar nada en este nuevo comienzo.
Esta noche de Samhain, o Halloween, nos invita en su esencia a recordar que estamos unidos a la naturaleza y que ella marca los cambios de ritmo en nuestras vidas.
Podemos vibrar en su misma frecuencia y acompañarla en las distintas partes del mundo desde estas propuestas que les hago con la mirada del Feng Shui.
Ya sea tiempo de expansión o de introspección, digamos juntos “¡truco o trato!”.
¡ Gracias por compartir !
Un Saludo
Carmen, Asesora profesional de Feng Shui.
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