Nuestro planeta tierra vibra con su propia frecuencia. Distribuye su energía a través de él y nosotros somos observadores de esto. La energía del planeta cobra fuerza a través de los vientos, las montañas, los ríos. El calor del sol que sale del este y se esconde por el oeste todos los días alimenta nuestra tierra. Los sabios de la antigüedad observaron la naturaleza y aprendieron a aprovechar esta energía para mejorar sus vidas, dejándolo registrado en los principios de Feng Shui.

Nuestros hogares interactúan con el planeta aunque no lo veamos, y toman de él su energía. El barrio en el que vivimos y los vecinos que tenemos influyen. Nosotros también vibramos con nuestra energía personal que podemos conocer a través del número Kuá al cual pertenecemos.

Esto nos permite conocer nuestras energías personales y nos da una orientación para canalizarlas con menor esfuerzo, ya que podremos alinearlas con las del planeta mismo. Este número nos indica que orientaciones son más productivas para trabajar, cuales nos dan tranquilidad, aquellas que nos aportan salud, y cual nos da seguridad en el amor y longevidad. También nos indica cuales direcciones no son buenas y conviene evitarlas para nuestras actividades diarias.

Este número Kuá nos permite saber cómo nosotros vibramos dentro de nuestra casa y nos relacionamos con ella. Es nuestra brújula personal.

Todo está relacionado. Todo es energía.

Asesoría Feng Shui

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Un Saludo
Carmen, Asesora profesional de Feng Shui.

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